Bicho

He estado sonriendo mucho últimamente, pero todo el sábado en la mañana fue una sorpresa para mi, la vida da vueltas, regreso a los lugares de los que tanto quiero huir pero todo se alinea en el momento exacto y es entonces cuando me doy cuenta que soy feliz. Pero no por el, sino por mi. Me siento bien y entonces estoy aprendiendo a disfrutar de mi vida, de mi entorno y de las personas que tengo a mi alrededor. 

Cuatro paredes y un rostro familiar que hasta no tenerlo en frente no estaba consiente de lo mucho que me hacia falta ver, unos cuantos besos, una charla intensa y una extraña sensación de comodidad me invadieron ese día. Aún no puedo explicarlo del todo pero lo que importa es que me di cuenta de muchas cosas que desconocía, los malos entendidos, celos infundados, peleas estúpidas y todo por simple desconocimiento de los hechos. Si tan solo hubiéramos tenído esa conversación desde el principio.. cuantas cosas hubieran sido diferentes. Pero lo más raro de todo fue que luego de todo eso, una tranquilidad invadió el cuarto y entonces todo me pegó de golpe, somos dos personas que se quieren mucho, que tienen una química innegable y que después de todas las tonterías que pasaron se dieron cuenta de que había una gran amistad ahí.. una amistad que puede crecer para llegar a convertirse en algo genial, sincero y divertido. 

Lo quiero demasiado, pero tenerlo en ese punto tan vulnerable y tierno me hizo darme cuenta de que el sentimiento que tengo por el no tiene nada que ver con el amor. Es una compañía, un clic infantil, una relación de cariño puro, complicidad, conexión pura y hasta cierto punto inocente. Es mi cuate y lo quiero. Mi bicho baboso. Peleamos nos contentamos N veces pero creo que al final ese cariño tan extraño es el que nos uné.. bueno.. aparte de otras cosas jajaja!

Definitivamente a veces uno se complica por nada.