A veces me dan ganas de renunciar, a todo eso a lo que estoy acostumbrada pero a la vez cansada de, esas cosas que pasan día a día, tomadas como normales pero a fin de cuentas aburridas, todas esas cosas que haces porque a lo largo de los años te han formado la idea que es lo correcto hacerlas, que es lo que se TIENE QUE hacer, o simplemente porque las huellas de tu camino marcan una línea casi imposible de redibujar ya que la simple idea de salirse de esa linea parece una locura. Algún sentido habrá en todo esto, no lo se. He caído a la idea que estoy cerca de mis 25 años y me siento más vacía que un vaso en un desierto, tampoco voy a caer al drama, porque he tenido momentos, momentos que sobresalen y que definitivamente he estado más que feliz ya sea con lo que me ha pasado o la gente que ha estado a mi lado, en fin, los he tenido, y no los cambiaría por nada. Pero he llegado a pensar que lo "normal" me tiene aturdida, cansada, fastidiada y triste. Hay algo para mi allá afuera, lo siento, algo más allá de todo lo que he tenido, de lo que he soñado y de lo que me he imaginado, lo sé. Es lo que me mantiene viva, lo que me motiva a seguir.
Siento que he cambiado mucho, nunca pensé que el desprecio de una persona me dañaría tanto a largo plazo, pensé que todo termminaría en un par de meses pero en realidad me marco de por vida. Me siento algo perdida en mis pensamientos, deseando estar en otra parte, lejos de todo mientras estoy sentada en un horrible escritorio tratando de hacer mi trabajo de la mejor manera posible pero sin ningúna bateria alguna para hacerlo, y no estoy hablando fisicamente, sino interiormente, apenas es lunes y me siento totalmente off. Si, quiero renunciar, pero a esto, a esta rutina, a lo "normal" y ser yo nada más. Quiero diseñar mi vida, tomar un morralito, tomar mi cámara, salir a caminar, salir a vivir. Eso, eso quiero.
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